30 may 2007

De paso a la trascendencia...

Después de la llamada de las ocho de la mañana, lo que queda es pensar en que jamás se debe tomar café expreso triple a las siete, y que Josie no debe seguir pensando en ubicar la realidad nacional después de haber ingerido tal droga: Y luego se pregunta el mundo porqué vivo neurotizada? Esta mujer me dejó tan mal como a sus dos ex maridos, y todo por escucharla hablar dos minutos! En fin...

Hoy hace viento y frío, ayer hizo calor... No sabe si hay alguna forma en la que su sistema de temperatura interna pueda dejarse de vincular con el fenómeno del cambio climático, con las mareas, con la luna.

Cree que la naturaleza debe hacer lo propio: Renovar las defensas, esa idea es tan desagradable! ... Implica necesariamente que hay un algo, un alguien de quien hay que cuidarse, y no, parece ser que de lo único que debo tener reservas es de misma... eso me dicen todas. Y da gracias a quienes con su núcleo sicótico han contribuido a que su melancolía se desplace un poco: Debo dejar de emitir dióxido de carbono, regenerar la flora -intestinal-..., hacerme a la idea de seguir escondida del sol. Vamos a ver si el bloqueador sirve esta vez.

Hay que comer con los Hare's tres veces a la semana, y cantar Hare, Hare, Hare Krishna. Krishna, Krishna Hare, Hare. Hare, Rama...!! y sanar. Aún no sabe cuándo se enfermó, pero supone que un conteo en los niveles de glóbulos blancos darían cuenta de su estado: La depresión lleva a la inmunodepresión, somos bichos! De conciencia?, de qué? Si no queremos saber nada! El cuerpo habla, hay que cerrar los ojos y escuchar.

Ella supone que ayer la hipersensibilidad de su interlocutor vespertino se debió a la condición que guardaba su aparato digestivo: Creo que debo hacer abdominales... Los sentimientos se guardan ahí, en la panza!

Vanesa y Maria Elena escribieron, Eugenia con todo y su contractura en la espalda llegará también, Alejandrina estará a las diez puntualísima en su lugar. La agenda está hecha, mañana en la mañana empieza de nuevo todo, parece que las tormentas del corazón cederán su espacio a las implacables aguas del poder fatuo: Vida tranquila, te voy a extrañar!

Mientras, de cualquier forma no piensa tomar el expreso que Josie ha recomendado, menos hacer de nuevo los días de treinta y seis horas. Corre el riesgo de que sus pastillitas de la felicidad queden sin efecto...

...Vamos a ver si la medicina del Dr. funciona, él dice que todo está en el "hacer". Y por si las dudas... no lo piensa, pues: Entre hacer y no hacer... Parece que ha optado ya en hacer. Qué? cómo? para qué? no se sabe... Ni lo pienses! Sólo no dejes de moverte! Que se corre el riesgo de volverse estatua! Y ella, ya fue la medeacalciforme.


Al final, y en medio de la avalancha emocional que le ha dejado la poca claridad de sus esquizofrénicas vivencias, está lo práctico desarrollado en los sentimientos: Tengo que hacer varias recetas, entre ellas llevar a cabo las recomendaciones de los viejos poetas de la infancia-adolescencia, retomar las instrucciones para llorar, para ser feliz, y de paso verificar los cánones de la moral en turno y actuar en consecuencia...

En su alma la reverberación de lo que pasó ayer está todavía. Toma un cigarro y lo mira, lo deja de nuevo y sigue escribiendo...

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¡Sí!

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